Narciso
C. Castellanos
στη μνήμη σας
Amanece
y los dedos de rosa de la Aurora
bracean entre las nubes
para alcanzar el rostro de Narciso,
apenas despierto
iluminando el espejo
que repite el fiel perfil de su belleza.
Ilumina
el lago ya el sol
donde Eco murmura sin descanso:
“Morir quisiera y no ser espejo
que nadie oye,
palabra en el vacío,
corazón de Narciso”
Oscurece
pronto, en la tarde invernal
los rosáceos dedos truecan
en marchitos rabos de nube.
Narciso duerme, Eco calla,
el sol yace en los brazos del mar.
Sobre el autor
David García Pérez es doctor en Letras Clásicas por la Facultad de Filosofía y Letras de la UNAM. Es profesor de Literatura Griega en esta misma Facultad e investigador titular en el Centro de Estudios Clásicos en el Instituto de Investigaciones Filológicas. Es tutor del Posgrado en Letras y de la Maestría en Docencia para la Educación Media Superior (áreas de español y de letras clásicas). Su línea de investigación es la tragedia griega desde la perspectiva de la filología y de la literatura comparada.